sábado, 31 de marzo de 2018

Todo

Yo contigo quería recorrer Estambul, pasear por Cuba y hacer el amor en la última planta del Burj Khalifa.
Quería enseñarte mis sitios favoritos de Florencia, darte toda la historia de Roma.
Pero tú nunca has sabido ser feliz, y perdiste todo un mundo por miedo.
A qué?
Mi parte favorita de la bomba siempre fue tu pólvora
hasta que me explotó en el lado izquierdo del pecho.
Yo que siempre fui hielo
terminé evaporándome en tu hastío.
En cambio tú,
ya estabas muerta.

viernes, 30 de marzo de 2018

El cajón de los desastres

Las tazas no se tiran.
Todavía sigue ahí, intacta, reluciente pero con un poco de polvo, boca abajo y de cara a la pared.
Ahí sigue porque las tazas no se tiran, porque no puedo verla, porque no puedo tomar café en ella desde que no estás.
Desde que su: ``What we have is from another planet´´, ya no es nuestro.
Desde que todo fue mentira,
desde que tú
fuiste mentira.

domingo, 25 de marzo de 2018

Nunca me has querido

``Yo siempre te he querido´´...
No hay puñal más mortífero que esta frase en tu boca después de acoger otras lenguas.
Yo siempre te he querido;
lo llevo grabado en la nuca
y me quema cada vez que la apoyo en la almohada.
Siempre,
me lo decías tantas veces que me lo creí desde la primera.
Dónde está?
Todo ese amor que me prometías,
los ``siempre´´
los ``nunca´´
los ``jamás´´.
Dónde estás tú? Que hace tiempo que no te encuentro.
Yo
siempre te he querido,
y aún sigo haciéndolo.

martes, 20 de marzo de 2018

Promesas.

Qué triste quererte sin saber quien eres,
sin conocerte.
Qué triste nuestra historia de amor que acaba en tragedia, con todos los protagonistas muertos, enterrados bajo tierra a kilómetros de tu corazón, ese que un día juró ser mío.
Malditas tus promesas, que parecían tan verdad que asustaban,
que son tan mentira que abrasan.
Qué triste yo,
que te dí incluso lo que no tenía, para que nunca te fueras,
pero mírate: saltando continentes y mares.
Qué triste, que ya no me acuerde de cómo sonaba tu sonrisa en mi boca.
Qué triste tú,
que ya no sabes lo que era el amor.
Y qué tonta yo,
aunque ya no quiera perdonarte.
Nunca.

lunes, 12 de marzo de 2018

A N:

Toda esta mierda es TUya 
culpa...

El huracán que asoló toda la tierra en la que había puesto mis pies alguna vez.
Fuiste el deseo más oscuro en las noches más claras.
La mano que siempre mecía mi espalda para que mi niña durmiera.
Dime ahora dónde está ella,
que yo todavía estoy perdida.
N, es historia,
cuento.
Pero sobre todo es abismo.
N, es todo este dolor que brota por mis manos.
Es placer que se acaba cuando las dos despertamos.
N, es lágrimas de desesperación.
N, es poesía.
N, soy yo.

domingo, 4 de marzo de 2018

Nunca más.

Aquí
en mí;
hace mucho frío desde que no estás,
pero ya no me sirve tu fuego abrasador.
Ese que acaba con todo
todo lo que toca-s.
Como tu nombre, que pudre cada página donde se posa,
como tus manos
que rompen cada cuerpo que rozan.

jueves, 1 de marzo de 2018

De todas las formas posibles.

De todas las formas posibles para pedirte que vengas, no se me ocurre ninguna mejor que esperarte.
No sé cómo decirte que todo es oscuro desde que no está tu luz aquí,
tampoco sé cómo demostrarte que puedo matar todas las dudas que vengan a torturarte.
Que podemos arrancar todo lo malo
y seguir escribiendo lo bueno: la felicidad del principio,
el amor del comienzo.
Y no me sale otra cosa que esperarte,
porque no quiero otra cosa que no sea tuya,
que no seas tú.
Y voy a perdonarme todas las veces que he comido polvo,
todas las veces que no he sentido amor.
Que voy a perdonarte todas,
todas estas espinas que has ido clavándome poco a poco.
Voy a sacármelas una a una con los dientes,
y voy a curarme para volver a quererte, como el que quiere saltar cuando todo está perdido.
Me perdono haber saltado tantas veces,
sobreviviendo a toda esta angustia.
Y me perdono esperarte aunque estés tardando tanto.